El presidente electo Rodrigo Paz pidió públicamente al mandatario saliente Luis Arce que no abandone el país después del 8 de noviembre, fecha en la que se realizará el acto de transmisión de mando.

Paz sostuvo que, más allá de si Arce decide asistir o no a la ceremonia, el país necesita que permanezca en Bolivia para rendir cuentas y brindar información sobre la situación del Estado tras casi dos décadas de gestión del Movimiento Al Socialismo (MAS).

“Si no quiere ir al acto, no importa, está bien, cada uno tiene derecho a su decisión, pero que no se vaya del país”, afirmó el mandatario electo en una entrevista con Bolivisión.

El pronunciamiento se produce después de que Brenda Lafuente, denunciante en un proceso contra Arce, solicitara formalmente a la Fiscalía General del Estado que se emita una alerta migratoria contra el actual presidente, por considerar que existe riesgo de fuga ante el cambio de Gobierno.

Lafuente expresó su preocupación luego de que el propio Arce anunciara que no participará del acto de transmisión de mando.

Paz reconoció que no tiene evidencias de que Arce planee salir del país, pero insistió en su exhortación.

“No, (no sospecho), pero le estoy pidiendo que no se vaya, que se quede”, señaló.

El presidente electo argumentó que en el proceso de transición no siempre se tiene acceso a toda la información gubernamental, por lo que será necesario un intercambio posterior.

“Vamos a pedirle muchas explicaciones para ciertas dudas o vacíos que se puedan generar al asumir el gobierno”, afirmó.

Paz también consideró que Arce debería dar la cara por el ciclo de casi 20 años del gobierno masista, del cual fue una de las figuras centrales.

“Usted ha sido ministro de Economía y presidente en estos 20 años. Si alguien sabe por qué estamos así, es él. Que se quede en Bolivia porque lo vamos a llamar”, subrayó.